Landarte 2021 acoge seis procesos de creación cultural contemporánea en poblaciones del medio rural de Navarra

El director general de Cultura – Institución Príncipe de Viana, Ignacio Apezteguía, con los responsables del Programa Landarte, actores y localidades colaboradoras. GOBIERNO DE NAVARRA
En su quinta edición, este programa se desarrolla en las localidades de Ezprogui-Ayesa, Murieta, Murillo el Fruto, Valle de Araitz, Valle de Arce y Zubieta

El programa Landarte, que celebra su quinta edición bajo el lema 'Cultura contemporánea y ruralidad', se desarrolla hasta el próximo día 30 de septiembre de 2021 en seis localidades navarras, en las que varios artistas y creadoras y creadores generarán diversos procesos culturales en colaboración con sus habitantes.

El artista Taxio Ardanaz trabaja en el municipio de Ezprogui-Ayesa; el Estudio-taller de Arquitectura Conjunta (formado por Inés Castillo, Felipe Fuentes, Iker Ordoño y Arantxa Satrústegui) en Murieta; la dramaturga Ana Maestrojuán en Murillo el Fruto; la cineasta Arantza Santesteban en Valle de Araitz; el equipo de Protocolectivo en Valle de Arce / Artzibar; y la artista Katixa Goldarazena en Zubieta.

Estos procesos creativos se encuentran actualmente en su fase inicial. Las y los artistas establecen, durante estos días, vínculos con las localidades donde van a trabajar. A lo largo de las semanas siguientes tendrá lugar la definición y desarrollo de sus proyectos.

El director general de Cultura–Institución Príncipe de Viana, Ignacio Apezteguía; el director general de Desarrollo Rural, Fernando Santafé; el director del Servicio de Acción Cultural, Lorenzo García; y los miembros del equipo coordinador del proyecto Anne Ibáñez y Marc Badal, del colectivo Kanpoko Bulegoa, han presentado esta mañana Landarte 2021. Han estado acompañados por parte del equipo técnico del programa y los y las artistas participantes. Además, los municipios seleccionados han estado representados a través de unos vídeos grabados por autoridades locales.

“Arte público sensible a los problemas de la población rural”

Landarte es la apuesta del Servicio de Acción Cultural de la Dirección General de Cultura – Institución Príncipe de Viana “por un arte público sensible a los problemas, necesidades e intereses de la población rural”, según ha comentado Ignacio Apezteguía, director general de Cultura.

Además ha añadido que “se configura como un programa que facilita la creación contemporánea desde el mundo rural y en el que el modo en que se realiza la creación es tan importante como el qué se hace; no es un programa finalista”.

Con esta iniciativa se promueven procesos de creación cultural contemporánea con comunidades rurales que participan junto a los y las creadoras “en un proceso de co-creación y de reflexión generador de conocimiento y experiencias”, han indicado, que aspira “a crear una red donde dialogar, aprender y compartir; incorporando un programa ético en cuanto a modos sustentables desde el punto de vista medioambiental, social y económico”, ha señalado el director general de Cultura.

Por su parte, el director general de Desarrollo Rural, Fernando Santafé, ha señalado que “los objetivos de este programa son complementarios con actuaciones del Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente en el ámbito de los programas europeos, como es el Programa de Desarrollo Rural de Navarra 2014-2022, donde se promueven y apoyan medidas de diversificación, así como estrategias de desarrollo local participativo”.

Y ha remarcado que “en esta labor, la cultura en general y la cultura compartida en particular, esa que posibilita el diálogo entre vecinos, así como el diálogo intergeneracional, que nos une a lo cercano y que tiene la capacidad de enriquecer el imaginario colectivo, no sólo es necesaria sino imprescindible”.

Compromiso con el medioambiente

Landarte “tiene un marco ético definido por el compromiso con el medioambiente y la sustentabilidad económica y social, y facilita la intervención intergeneracional”, han explicado.

Con su desarrollo se persiguen varios objetivos. Por una parte, se promueve el empoderamiento de las comunidades rurales a través de la cultura contemporánea, comprometida y entrelazada con su tiempo, cercana al territorio y a sus gentes.

También se contribuye a la profesionalización del sector cultural y que éste adapte su mirada al medio rural; esto es, que los procesos creativos den voz a las y los vecinos, desde la empatía, destaquen sus conocimientos y movilicen su capacidad de acción en un proyecto cultural.

Asimismo, según sus responsables “busca el impulso de una acción cultural que ensanche la autonomía y la capacidad de decisión de las comunidades y establezca un diálogo real, una relación directa e íntima, con su territorio, con su patrimonio cultural inmaterial, con la transmisión de sus formas de vida o con su imaginario colectivo”.

Por último, han añadido, quiere rebasar “las experiencias de acción cultural en el mundo rural centradas, por lo común, en su acepción más tradicional e ilustrada”.

Coordinación, dinamización y vinculación

Landarte 2021 cuenta con un equipo mediador encargado de coordinar a todos los participantes (localidades, artistas e instituciones), dinamizar la población local, acompañarla en la vinculación con la comunidad y su entorno, e identificar y asesorar a las y los artistas en proyectos coherentes.

Además, el programa cuenta con un equipo de documentación y de comunicación para registrar los procesos de trabajo. También se generarán materiales gráficos y audiovisuales que está previsto difundir a través de la página web, blog y redes sociales.

La actual edición mantiene la perspectiva adoptada en 2020, cuando se repensó el programa con la intención, han recordado, “de impulsar la participación de la población local en todo el desarrollo del proyecto” y subrayar también “la importancia de la evolución del proceso (reflexión, encuentro, diálogo) frente a los resultados finales”.

Como el año pasado, Landarte 2021 afronta el reto de la pandemia causada por la COVID–19. Y como en 2020, cuando el programa se pudo desarrollar sin contratiempos, la quinta edición se ha diseñado con las pertinentes medidas de seguridad sanitaria. Asimismo se asume que la nueva situación ha obligado a la comunidad de creadoras y creadores a replantear sus formas de trabajo y reinventarse.

Además, se quiere convertir Landarte en una oportunidad, han indicado, “para que las comunidades rurales de Navarra se planteen cuestiones fundamentales acerca del modelo de mundo rural deseado y las prácticas (sociales, culturales y económicas) para conseguirlo”.

Para sus impulsores resulta fundamental la participación de la población local en los proyectos, junto a los creadores profesionales para así, de manera colectiva y horizontal, generar contenidos y discurso. “Se pretende que las miradas de la comunidad sobre la creación contemporánea y del artista sobre la realidad de la comunidad rural sean mutuamente estimulantes y enriquecedoras”, han señalado.

Para conseguirlo, las y los creadores trabajarán en las poblaciones seleccionadas, interactuando con ellas, mapeando sus gentes y sus discursos para encontrar las claves de un proyecto cultural con sentido e identidad para cada localidad.

Y en este contexto, “las creadoras y creadores del proyecto se postulan como agentes de toma de conciencia, replanteamiento de la autopercepción de las comunidades y cadenas de transmisión en la inserción de la cultura rural en el centro de la cultura contemporánea”, han concluido.