La Guardia Civil ha imputado en calidad de investigados a 3 personas como presuntas autoras de los delitos de estafa y blanqueo de capitales a una empresa Navarra

GUARDIA CIVIL

El importe de lo estafado superó los 4500 euros, de los que parte fueron recuperados

La Guardia Civil de Navarra ha imputado en calidad de investigados a 3 personas, como presuntas autoras de los delitos de estafa y blanqueo de capitales, tras haberse comprobado que realizaron una serie de fraudes a una empresa situada en Navarra. Todo ello con la intención de conseguir dinero mediante la aplicación de técnicas informáticas maliciosas.

Dentro de la Operación denominada “Txokolatada”, se procedió a la imputación en calidad de investigados a una mujer de 23 años, vecina de Valencia, a un varón de 23 años, vecino de Asturias y a un varón de 46 años vecino de Bilbao (Vizcaya). Todas imputadas en calidad de investigadas como presuntas autoras de los delitos de estafa y blanqueo de capitales.

La investigación tuvo su origen el pasado mes de Abril del 2021, cuando se recepcionó una denuncia en la Oficina de Atención al Ciudadano de la Guardia Civil en Beriaín (Navarra), en la que el gerente de una empresa de la zona ponía en conocimiento que había realizado dos pagos con una suma total de 4.561 euros vía trasferencia bancaria a un supuesto proveedor. Fue con una tercera factura, la que le produjo dudas de que podía estar siendo víctima de una estafa y lo puso en conocimiento de la Guardia Civil.

El Equipo de Policía Judicial de Pamplona se hizo cargo de las pesquisas, y averiguaron que el dinero transferido por la empresa víctima de la estafa, había ido a parar a 3 cuentas bancarias cuyos titulares residen en Asturias, Valencia y Bilbao. Por lo que se contó con la cooperación de las Unidades Orgánicas de Policía Judicial de la Guardia Civil en Valencia y Asturias para la localización e investigación de sus titulares de las cuentas, así como la identificación de las personas que operaban con ellas.

La investigación ha estado dirigida por el Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona. El cual, ante las pruebas presentadas, ordenó el bloqueo de las cantidades que aun permanecían en las cuentas bancarias de uso delictivo y con ello recuperar parte de lo estafado a la empresa navarra.

Tras reunir las pruebas necesarias y localizar a los supuestos autores, se procedió a la imputación en calidad de investigados a una mujer de 23 años, vecina de Valencia, a un varón de 23 años, vecino de Asturias y a un varón de 46 años vecino de Bilbao (Vizcaya). Todas imputadas en calidad de investigadas como presuntas autoras de los delitos de estafa y blanqueo de capitales.

 “Man in the Middle”

Las indagaciones realizadas permitieron corroborar cómo los autores de la estafa habían utilizado un método conocido como el “Man in the Middle”, donde el ciberdelincuente introduce un virus troyano en el equipo informático del destinatario del email. Este troyano está diseñado para el robo de datos y credenciales bancarias, o de otro tipo, a través de ficheros o enlaces adjuntos que tratan de convencer a los usuarios para que pulsen sobre ellos o los abran.

El peligro radica en esos enlaces o archivos adjuntos, ya que si el usuario pulsa o los abre, se iniciará una cadena de ejecución del malware (soporte informático malicioso), que terminará instalado en el sistema, comprometiendo su seguridad, buscando como objetivo principal las credenciales y claves de operaciones bancarias, así como datos de carácter personal o empresarial.

Los autores, una vez infectado el sistema informático de las empresas implicadas, observan sus comunicaciones hasta que detectan un requerimiento de pago, interceptando dicho email, modificando el mismo para que figure un número de cuenta diferente y consumar así la estafa.

Recomendaciones

Desde Guardia Civil se recomienda llevar a cabo una serie de acciones para disminuir la posibilidad de ser víctima de este tipo de estafas:

  • Se recomienda prestar atención al remitente de los emails recibidos.
  • Evitar abrir documentos o archivos adjuntos, salvo tener la absoluta certeza de quien es el emisor del email.
  • Cambiar periódicamente las contraseñas de acceso a las cuentas de correo electrónico.
  • Desconfiar de solicitudes de datos personales a través de Internet.
  • Instalar y mantener actualizado en su ordenador un sistema de seguridad y antivirus de una empresa de confianza.
  • Si tiene sospecha de que pueda ser una estafa, realice consultas directamente a la supuesta entidad comunicante, sin utilizar los medios de contacto que aparezcan en el email. Tras ello, póngalo en conocimiento de la Guardia Civil.